A este blog le quedan dos telediarios

Lo que vino, se fué.

Y el futuro de este blog es negro, negrísimo ya que he dejado la práctica del tiro con arco desde hace una larga temporada. Y no tengo nada claro que algún día vuelva.

Seguiremos no informando...

Resultados de las primeras dos rondas.

Bueno, ya tenemos los resultados publicados... un poquito tarde pero mejor que nunca.

Evolución de puntuación.

Por ahora, y con solo dos puntos de referencia, la cosa no vá mal. He conseguido las dos metas de cada tirada (superar los 500 puntos en la primera y los 540 en la segunda) y estoy situado el segundo de los competidores del club.

El equipo está clasificado en cuarta posición, clasificandose para la final los primeros ocho. Lo cual nos dá una muy buena perspectiva de conseguirlo ya que la mayoría del equipo está debajo o muy debajo de sus puntuaciones normales.

Teniendo en cuenta mis limitaciones tanto en técnica como tecnología me puedo poner como próxima meta el conseguir llegar a 560 puntos, pero realmente lo veo muy dificil.

Nos vemos en Abril!!

"Empujar"

Hoy me he bajado a tirar a 50 metros, confiado en que iba a agrupar muy bien después de la tirada de ayer. Pero me he llevado la desagradable sorpresa de un movimiento circular alrededor del amarillo con el brazo de arco que me provocaba una falta absoluta de agrupación... más bien como escupir contra una pared.

Después de unas entradas de mosqueo ascendiente, paro, tomo el aire y me concentro en buscar sensaciones y en comprobar la técnica. Primeramente "la garra" enganchar corréctamente la cuerda en la primera articulación de los tres dedos, a continuación meter bien la mano en la empuñadura, continuamos con la apertura y el anclaje del hombro - especialmente la tensión de la musculatura - la transferencia de tensión que no debe ser brusca ni demasiado lenta mientras inspiro, y el anclaje lo más dinámico posible, con la sensación del pulgar en su posición debajo de la mandíbula y la cuerda contra la punta de la nariz y el lateral de la boca.

Y aquí he encontrado el fallo que he corregido y he vuelto a agrupar: tener bien apoyada la almohadilla del pulgar en la empuñadura y "empujar". La sensación de empujar con el hombro, metiendo presión al arco y estabilizándolo. Así consigo evitar el giro alrededor del amarillo y, con un poquito de concentración para no mover el hombro, hacer una tirada correcta.

2ª Tirada Liga FMTA 70m.

Tensión, concentración. Cada flecha vale un mundo, cada suelta es una crisis, cada descanso es una lucha contra uno mismo. La meta está a no más de 12 flechas, ni más ni menos. Y cada vuelo es un paso más cerca al triunfo o a la decepción.

Por fin ha llegado la segunda tirada del campeonato FMTA de 70 metros. Llevo dos semanas entrenando en calidad, más que en cantidad, y obteniendo las mejores agrupaciones de mi cortísima vida de arquero. Vamos que me siento tan cómodo como con el palo y las cosas pintan muy bien.

Alvaro, Justo, Cris, Raul y Hector. Solo faltan Raulillo y yo.

Como meta, teniendo en cuenta que en la anterior conseguí 521 puntazos, la “mágica” marca mínima que se exige para apuntarse a una prueba Nacional y que es de 540 puntos. Es decir hacer 270 puntos de media… lo cual, para mí, es un montón de puntos. Pero si fui capaz de hacer 271/250 en la tirada pasada… pues la cosa está muy difícil pero no imposible.

Y así, para empezar con cambios me tengo que cambiar el color de mis flechas al no haber ni en J&P ni en Cerra spingwing de color amarillo para ZURDOS.

Mis flechas de blanco, no son tan bonitas como las amarillas pero vuelan bien.

En la diana vuelve a haber mayoría de zurdos, incluyendo a mi antiguo compañero talla XXL (que es un tío majo de cojones) del año pasado. Y un diestro, con el que no había tirado nunca, y que se quedo a 4 puntos del 300 y a 6 puntos del 600. Una máquina el tío.

El máquina, el visor y su dueño. El tercero de la diana aún no había llegado.

Empezamos la ronda y parece que voy encontrando el visor, aunque este campo tiene una maldición y me vuelvo a ir mucho a la izquierda. Para solucionarlo, al quedarme sin recorrido horizontal, le meto tres vueltas al puntero y me queda niquelado. En la segunda entrada, al no tener teleobjetivo, no me doy cuenta que me he pasado bajando el visor y me hago varios impactos en negro y me tumbo la puntuación con un 34. Para solucionarlo me cambio de lado en la línea de tiro y me pongo al lado del tele de uno de mis compañeros de diana y por fin me entra en la cabezota que es IMPRESCINDIBLE a esta distancia.

Acaba la ronda y me veo con un 272, lo cual teniendo en cuenta el 34, no está nada mal y supero en un punto mi puntuación máxima en 70 metros.

El resto del equipo es una sensación agridulce. Justo sigue sin encontrar su camino, Cris sufre como un cochino al igual que Raulillo. Álvaro se le ve mejor cara y Raúl y Héctor están tirando muy bien. De señalar la tiradona que llevaba Héctor que a falta de dos entradas tenía el 300 en la mano, pero la presión le pudo y se le escapo entre los dedos. El día que entrene va a ser la bomba!!.

Hector, rozando los 300.

Empezamos la segunda vuelta y la cosa va pintando bien, no estoy cansado, casi no tiemblo, pero no consigo hacer amarillos… En la tercera entrada conseguí meter un 9 y cinco 8 alrededor del amarillo. Un perfecto arco alrededor de la zona. Pero bueno, mantenía cuarentas altos que me valían para ir haciendo puntos.

Y llegan las dos últimas entradas y me veo que estoy a 90 puntos de 270, que es lo que necesito para llegar a 540. Y siento la presión y el acelerón de saberme capaz pero justo en el límite. Una sola mala suelta o un par de negros de más y se me cae cualquiera de los 45 por tirada que necesito.

Concentración. Relajación. Visualización.

En este momento baja el sol y las flechas se van a la derecha y abajo. Por lo cual a tocar visor y a mirar en cada suelta por el teleobjetivo si está bien regulado. La primera flecha va a un azul… y toco visor. Las otras dos van al rojo. Las tres últimas amarillo. Parada a esperar que los CD tiren sus dos últimas entradas y, ya al final del atardecer, entramos a la última y definitiva.

Tiro la primera, miro por el tele, tiro la segunda, miro por el tele, tiro la tercera, miro por el tele y veo que la cosa pinta bien y me acabo las últimas tres flechas de una sentada.

Emocionado y ansioso me acerco de prisa a contar… y SIIIIIIII 276!!! 548!!!!!!!

Reconozco que cuando me puse la meta pensé que me había pasado. Que 20 puntos eran mucho, que lo iba a tener muy jodido. Pero la alegría de haberlo conseguido ha valido el esfuerzo. Como en mis tiempos con el palo, me he levantado de la cama con la alegría de esta puntuación en la mente y me cubre una sensación de buen rollito.

No se me ha quitado esta cara aún.

Ahora tengo dos metas nuevas: Una es comprarme un teleobjetivo. Y la segunda es fuera de la competición (cualquier incremento será suficiente para mí) y es conseguir 300 puntos a 50 metros.

Justo termino como empezó, peleandose consigo mismo con puntuaciones muy bajas para su nivel. Cris también con algun que otro nulo (cosas de ser multidisciplinar). Alvarito, ni idea. Creo que bien, en su línea. Yo empaté con Raulillo, que con un pedazo de doscientos ochenta y mucho medio arregló el 250 de la primera entrada. Hector, aún bajando su puntuazión hizo un 550 y el triunfador del equipo, Raul, le saco un puntito por encima.

Por último, y como pataleo, es absolutamente impresentable el que no se hayan publicado los resultados de la primera tirada aún. Me parece que a la FMTA le está viniendo un poquito grande esta competición. Pero bueno, es lo que hay.

Album de fotos

2ª Tirada FMTA 70m

1ª LIGA FMTA 70m

Prueba superada… 521 puntos!!

En un día estupendo, después de meses de lluvia, nieve y frio, quedamos en la rotonda de siempre para acudir a la primera tirada de la Liga FMTA de 70 metros. Allí estamos todos los “viejunos” del club – Cris, Justos, Raúl, Raulillo, Alvarito, Héctor y el menda que escribe (LitelLlon) – con nuestras nuevas camisetas y con hambre de competición.

Dado el excelente estado del tiempo, le pedí a Justo que llevara mi equipo y disfruto del paisaje y la velocidad sobre mi caballo de hierro (y aluminio, y carbono, y titanio, etc).

Mi moto.

El campo está precioso con su césped artificial y las dianas multicolores están lejos… muy lejos… casi más lejos que el año pasado. Pero no tenemos mucho tiempo de disfrutar de la vista porque llegamos justo a tiempo de montar y empiezan las tres rondas de entrenamiento.

El campo está precioso... y muy lejos las dianas.

Algunos hasta calientan.

En mi primera entradan de práctica pongo el visor a 69 y meto dos flechas en la madera de la pata izquierda, y dos más en el prado. Mi cara tiene que ser un poema ya que solamente tengo seis flechas emplumadas y no me quedan más plumas y soy consciente que si he roto cualquiera de las puntas, me pudo ir a casa. Por pura suerte no ha sido así y empiezo la competición con mis seis flechas – dos de ellas con pedazos de spingwing por plumas.-

Me siento cómodo en esta primera ronda. El brazo de arco nota mucho el entrenamiento con la pesa porque está estable y poquito a poquito voy manteniendo un ritmo bastante bueno que me lleva, incluyendo un último nulo por una suelta indecisa, a una excelente puntuación de 270 puntitos.

El brazo de arco aguanta bien, el de cuerda empieza a flojear.

Paradita de 15 minutos, que se convierte en diez y deja a un grupo de chavales – que no están a lo que se tiene que estar en una competición que es la propia competición – con la primer a entrada en blanco por desaparecer y llegar tarde.

Empezamos el segundo round y el sol me da en la cara y me molesta muchísimo junto con el cansancio en el brazo de cuerda que hace – por problemas de técnica- que tiemble y me esté quedando sin fuerzas. Por ello me caigo a 38 puntos, seguido de un 41 y otro 38… y veo peligro la meta de hacer 500 puntos al final. El sol por fin desaparece por detrás del horizonte, pero el temblor en el brazo de arco aumenta y lo compenso recortando tiempo en la fase de apertura y apuntar.

El equipo, una piña.

Me vuelvo a subir al carro de los cuarenta altos y termino la última entrada con una buena puntuación, a pesar de que de nuevo terminamos de noche, obteniendo en este Round 251 puntitos. Lo cual sumado a mis 270 del primer round hace… tachan!!!!

Otra vez acabamos de noche.

521 puntos!!

Prueba Superada!!!!!

Moraleja, tengo que entrenar la apertura de espalda porque Alvarito me ha comentado que si me tiembla el brazo de cuerda es porque estoy usando el brazo y no la espalda. Tengo que entrenar el fondo para llegar más entero al final de la tirada. Ah, y tengo que llevar GORRO, que el tirar cegado por el sol me hace perder muchos puntos.

Y dentro de dos semanas más con un nuevo listón a buscar, los 540 puntos del corte de una competición Nacional.

Todos contentos... :)

Album de fotos

Otro año más

Y hete aquí que mientras estaba en el campo tirando a 50 metros, por la lluvia no merecía la pena ir al Sagitta, aparecen Raul y Cris con el premio del primer puesto de este club.

Debo aclarar que es una tirada muy atípica en donde se forman equipos de tres arqueros cada uno en una modalidad. Instintivo, recurvo y poleas. Y tiran todos a 25 metros en dianas de animales, los primeros, de 18 metros, los segundos y triangulo de las vegas los terceros.

Lo mejor, o peor, es que llevan una racha de tres años en donde ya llevan dos primeros puestos y un segundo… a este paso no les invitan más… :)

Cris y Raul con su fflamante trofeo del primer puesto.

Competición: motivación.

En mis propias carnes sufro cada año la fuerte inyección de motivación que produce el inicio de la temporada de competición. De hecho para mí, el arco adquiere todo su sentido como actividad deportiva cuando el elemento competitivo aparece.

Pero a algunos del club les motiva aún más el no estar al nivel de sus propias expectativas y, ni cortos ni perezosos, le dan una vuelta más de tuerca a su preparación física.

Ucranianas. Odiadas, amadas pero siempre eficientes.

Entrenamientos a 70 metros en Sagitta.

El club en donde yo práctico el Tiro con Arco es, para mí, uno de los mejores del mundo mundial con la excepción que nuestra máxima distancia de peto es a los 50 metros. Lo cual está muy bien cuando eres novel, pero se queda pequeñito en cuanto empiezas a competir "en serio" en donde lo más común es un 2x70 o un Round Fita 90, 70, 50, 30. Y ya que me he apuntado con el equipo para la competición de 70 metros de la Federación Madrileña, pues me puse a buscar donde poder entrenar esa distancia.

Hace unas semanas fui con Raúl a un interesantísimo curso sobre la Legislación de Tiro con Arco -al que le voy a dedicar un post-resumen ahora que he recuperado las fotos del evento- organizado por los compañeros del club Sagitta. Y en los que pensé para poder localizar un campo en donde entrenar la distancia.

Cumpliendo todas las expectativas, no solo nos lo han ofrecido para el fin de semana, sino abren la puerta a un posible acuerdo entre clubes. Vamos, así dá gusto disfrutar del mismo deporte.

El Viernes nos plantamos Raulillo, Cristina y el menda que escribe. Y se me quedaron dos cosas en la memoria. Una, que no estoy tirando tan mal como pensaba y que creo llegar bastante entero a la 12ª ronda. Y dos, una chiquilla de no más de 15 años, que llevaba 250 flechas y no le temblaba nada. Una campeona que me provoca la sana envidia de lamentarme de no haber sido tan precoz al encontrar este deporte y del futuro radiante que la espera.

El Sábado Raulillo y yo estuvimos tirando bajo una pertinaz ligera lluvia y, después de una 13 rondas, me fui dejando al "inagotable" machacando junto con un poleas que no se salia del 10 a 70 metros.

Hoy, el día está lluvioso y tengo muuucho que hacer. Pero quisiera ir a nuestro campo a entrenar en 50 metros. Porque tengo que interiorizar la posición del anclaje ya que a veces meto la mano debajo de la mandíbula y a veces no, perdiendo precisión horizontal.

En resumen, he vuelto.

Liga Aire Libre FMTA 2009 - 1º prueba.

Han empezado nuestros noveles su primera tirada del campeonato de este año... y me lo he vuelto a perder.

Tenia muchas ganas de ir a verlos pero el ordenador del salón de casa, el que usa la familia, ha petado del todo y me he pasado toda la tarde liado intentando arreglarlo primero, y después buscando su sustituto.

De todas formas, hoy les veo en el campo y a ver que me cuentan. Que me espero - con el nivelazo que llevan todos - que copemos los primeros puestos.

He de reconocer que me causan envidia y orgullo. Tiran una barbaridad, bastante más que yo, tiene unos equipazos y no paran de entrenar. Además de, menos uno, estar en la treintena.

Me huele a mi que si es como yo creo, este año arrasamos del todo. Y por equipo, si los nervios aguanta, también.

De vuelta...

Uff, cómo pasa el tiempo.

Hace un montón de meses que me sumí en un bache de desgana con respecto al tiro con arco. Pero la vuelta de la competición me hace renacer de mi apatía y volver a difrutar de mi afición.

Lo primero, reforzar el brazo de arco. Osea, pesa de medio kilo en la muñeca y a tirar flechas. Todas las que pueda, que son más bien poquitas - no paso de 80 flechas sin temblar de pies a cabeza -.

Segundo, probar nuevas palas de foam, que las mías de madera-carbono me están dando 41 libras y son duras como piedras. Justo me deja unas W&W de 70" - demasiado largas para mi apertura - y se nota la diferencia una barbaridad. Pero Ana, y un regalo inesperado de cuatro ruedas, me lleva gustoso a aparcar el cambio de palas - y de flechas - hasta que los Mexicanos me devuelvan el dinero robado.

Tercero, dar mi brazo a torcer - mira que soy cabezón - y olvidarme de las plumas de escudo, que las pego mal y se me caen todas, y volverme a mis spin-wing de color amarillo que tantas alegrías me han dado.

Cuarto, corregir el botón. Raul me ha dado una nueva forma de entender la reacción de la flecha y es: "Si se acerca al botón es flexible, si se aleja es rígida". Con este sistema me olvido de si soy zurdo o diestro o si se vá a derechas o a izquierdas. En resúmen, tenía las flechas flexibles una barbaridad. Y ahora, con el Beiter a poco más de 20 milimetros de marca, me van bien las desnudas pero tengo que pensarme si poner un botón más duro.

Por último, por ahora, Alfredo - que deja la presidencia - me avisó que estaba adelantando un poquito la cadera (para abrir las malditas 41 libras con mis brazos de trapo) y yo me dí cuenta que estaba anclando mal la mano de suelta en la mandíbula y se me iban a la derecha.

Corrijo todo y estoy, de nuevo, en el nivel de cuando me fuí. Es decir 4 amarillos seguros a 30. Ya veremos que pasa a 50 hoy.